09 Ago, 2010
Pobre mundo
El mundo no es bueno —él no tiene la responsabilidad, pobre mundo, somos nosotros los que no somos buenos—. El ser humano se comporta como un animal enfermo de supersticiones, de rutinas, prejuicios, de los que parece que no somos capaces de liberarnos.“El ser humano actúa como un animal enfermo”, La Opinión de Granada, Granada, 12 de marzo de 2009